En esta
casa taller quiero reflejar todo el
proceso de la lana, para ello he creado
distintas dependencias con escenas de
las distintas tareas dentro del
tratamiento de la lana y una pequeña
escena familiar que se verá a través de
la ventana.
Cortamos
las piezas que van a formar la
estructura de la casa. A la pieza de la
azotea le practicaremos varios
orificios. El de atrás para la escalera
de acceso a la azotea y los de delante
para embutir en ellos los cuencos de
tintado de la lana.
En la
planta inferior, donde estarán las
hilanderas cardando, hilando y tejiendo
he colocado también un pequeño espacio
de almacenaje elevado del suelo al que
se puede acceder mediante una escala de
mano (foto 4).
Las
barandillas de las terrazas están
elaboradas con listón de madera de balsa
a las que he marcado la textura de la
madera con un cepillo de cerdas
metálicas en el sentido de la veta.
Antes de pegarlas en su lugar las he
pintado con marrón chocolate mezclado
con gris piedra para la base y una vez
seco una segunda mano a pincel seco de
gris piedra.
Las
escaleras y el suelo del taller están
hechos con porexpán extruído (no tiene
bolitas). Para pegar el porexpán se
puede hacer de dos maneras:
En este
caso he utilizado pegamento de contacto
que nos fija las piezas con mayor
rapidez y además no hay que tapar
después los agujeritos que nos dejan los
extremos de los palillos. Pintamos y
pegamos a la estructura.
La
decoración ya es a gusto de cada uno. Yo
he utilizado hilos de colores, algodón y
plantitas de acuario. |